Qué gran idea la del Ministerio de Hacienda con su anuncio de Navidad, ese que dice que tus impuestos vuelven, en plan Turrón el Almendro, aunque se echa de menos una banda sonora que nos transporte a esas entrañables y próximas fechas.
Por eso he estado dándole vueltas a una banda sonora para el anuncio que recuerde lejanamente a la publicidad del turrón, y podría ser algo así como “vuelve a la Agencia Tributaria, vuelve que te esperamos. Vuelve a tu Delegación de Hacienda por Navidad, para que te clavemos el IVA y algunos otros impuestos que la Montero se va a inventar”. Por supuesto en allegro ma non troppo porque la Navidad es un periodo de júbilo, pero de júbilo contenido. Además, últimamente mis creaciones musicales son menos comerciales, más yo como artista, ya me entienden.
Y les digo una cosa, para mí los de Hacienda deberían darle un toque más entrañable al anuncio; lo suyo es que el spot termine con una voz en “off” en plan El Corte Inglés: “La Navidad es el mejor regalo y, como tal, está sujeta al impuesto de donaciones”.
Aunque, sensibilidades artísticas aparte, es verdad lo que dice el anuncio: tus impuestos vuelven, que es lo que los que entendemos de temas fiscales llamamos el “efecto Koldo-Ábalos”. Es cierto que lo suyo sería que volvieran a tus manos pero si empezamos con tecnicismos le quitamos la magia a la Navidad.
Porque sé que hay gente que se pregunta en qué se está gastando el Gobierno el dinero de nuestros impuestos. Pues yo lo he descubierto: en gasolina para el Falcon del presidente con el fin de mantener el espíritu navideño. ¿O se cree alguien que tanto ir y venir de Pedro Sánchez con el avión presidencial es porque sí? Pues no, es para traer los regalos de Papá Noel desde Laponia, porque lo de atravesar las fronteras europeas se ha puesto asaz chungo, a lo que hay que sumar eso de los derechos de los animales, que los renos ahora pasan de patearse los cielos desde el culo del mundo hasta aquí con un contrato de fijo discontinuo, que no es más que otra forma de contrato basura. Hay que entenderlos.
Entonces, el bueno de Pedro, consciente de la ilusión que despierta la Navidad, ha hecho lo mismo que los marines, adaptarse, y usa el Falcon para traer los regalos fingiendo que va a cumbres internacionales, a República Dominicana a Dios sabe qué o a conciertos de música.
Todo para que los niños no descubran que él, Pedro Sánchez, es Papá Noel. Y la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, es un elfo. Por eso vino con las misteriosas maletas a España, para traer regalos, aunque no sepamos para quién.
Lo sé, les he sorprendido, pero tenían derecho a saberlo. Ya está bien de tanta fake news.
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